domingo, 21 de diciembre de 2008

!!!Feliz Navidad!!!


Hoy ha amanecido un bendito sol desde el horizonte de mis dedos, es un sol con miles de colores, se asemeja a una gran bola de árbol de Navidad... los meses de invierno se llenaran de esa luz, ahora esta justo encima de una esquina de la cama, la empuje allí para que si me despierto por la noche me haga cosquillas,chispas de arcoiris para espantar a los fantasmas. Faltan dos días para la Nochebuena, a mí me gusta ¿ o me gustaba?..Pero que importa como acaben los verbos, yo creo que se pueden transformar, que se pueden dirigir como yo hice con el sol esta mañana... me he comprado una colonia de rosas, un chalequito de raso violeta y una falda a juego... y a ello voy, y me concentro en jugar a la Navidad, y no necesito a las Barbis, si quiero puedo y quiero... quiero... quiero... y además estoy cubierta de turrón de chocolate ¿quién puede resistirse? Eiko esta Navidad es una niña-mujer con un espacio abierto e infinito para que la ternura la desborde... !!!FELIZ NAVIDAD!!!

miércoles, 10 de diciembre de 2008

Eiko quiere creer...


Eiko quiere creer que todo es posible, las pequeñas decepciones las tiene guardadas en una cajita y un lazo las aprieta para que no se salgan y se le escurran de nuevo dentro del corazón... las grandes le vaciaron los ojos de luz y unas gafas que esta deseando quitarse la ayudan a ver, aunque no todo... hace poco tropezó con un recuerdo y se ha hecho un desconchon en la rodilla, cojea levemente por que tiene miedo de dar mas pasos...
Eiko piensa que porque van a querer de nuevo hacerle daño, y se compone ante el espejo y ensaña besos que dejen las mejillas del color rosa que tanto le gusta... baila en el salón por si “la sacan” y practica un “si quiero” de boca ancha y sonrisa abierta...
A veces el rumor de la cordura intenta despertarla, prevenirla, Eiko hace como que no lo escucha, ella que sabe de perdidas anda en esta ocasión, haciéndose la perdida, solo por ver si así conjura al mal augurio que un día la espeto Tu No Tienes Derecho...

viernes, 5 de diciembre de 2008

Lo que nunca me contesto mi Madre....

Madre... ¿por qué el amor se acaba?,Porque salta de uno a otro y a otro... y se agota en la búsqueda de lo que solo es el destello de un brillo fugaz... las hojitas cuando se mojan son perfumadas, de un verde mas limpio, más bello... pero un silencio de Sol las seca... Madre¿ cómo se tapa el Sol? Madre me muero de lo inacabado... Madre... y el no lo sabe...
Una trenza de deseos se deshilvana entre mis dedos... Madre, tu me dijiste que el amor no dolia, Madre... ¿Por qué lloras?...Una mirada cargada de ternura me envolvió el corazón en terciopelo, mi Madre se hizo niña y esa tarde la pasamos enterita haciéndonos pasteles. Hoy aun no sé la respuesta... pero desde lejos su mirada sobre mí sigue siendo un dulce terciopelo.

miércoles, 3 de diciembre de 2008

El guante perdido...


Me dan pena los guantes sin pareja, te los encuentras sobre todo en invierno tirados en el suelo... se quedan muy quietos en el lugar que los dejan, quietos tiritando de un "sinsentido", incapaces de darse calor a ellos mismos... me dan pena, algunas veces si los encuentro los dejo en algún sitio bien alto y visible, para que si regresan a buscarlos los encuentren... secos, abiertos los deditos, esperando la caricia de la mano que se mecerá dentro de ellos dando sentido a su vida de guante.
Yo de mayor no llevare guantes, no quiero perder a ninguno, y además... Seguro que mis manos tendrán otras manos para que “entrecuatro” seamos como un solo guante, un guante único con sonrisa de dedo a dedo. Un guante con memoria para si se pierde siempre saber volver a casa.

lunes, 1 de diciembre de 2008

Caperucita y el Pajaro


Había una vez, una niña llamada: Caperucita Roja.
Ella era muy lista, guapa e inteligente y le gustaba cocinar.
Conocía las propiedades curativas de algunas plantas.
Un día, paseando por el bosque, se encontró un pájaro herido y hambriento. El pájaro era gris y con la cabeza roja.
Caperucita lo llevó a su casa, le hizo un nido y cogió una planta curativa, la machacó y con un algodón se lo puso en la herida.
Al cabo de unos días, el pájaro estaba mucho mejor. Ella lo soltó pero él volvió con ella.
Se hicieron grandes amigos y Caperucita siguió cuidando animales heridos, pero ahora, ya no estaba sola.Cuando el pajaro sano su dolor,se fue despues del verano.Caperucita le dijo adios con una sonrisa.!Hasta que vuelvasss!


Eder 6º B Primaria


Eiko piensa... ¿cuanto tardan en volver los pajaros que no vuelven?...¿como se dejan las miguitas colgadas en el cielo para encontrar las rutas de vuelta ?...Eiko llora,no entiende el silencio de los pajaros.